El Gobierno condecora al ex ministro Bermejo.
El Consejo de Ministros ha otorgado este viernes la Gran Cruz de la Orden de San Raimundo de Peñafort a Mariano Fernández Bermejo, ex ministro de Justicia. Bermejo tuvo que dimitir por el escándalo de sus cacerías con el Juez Garzón y el fiscal del caso Gürtel.
Orden de San Raimundo de Peñafort
Por decreto del 23 de enero de 1944, se creó la Cruz de San Raimundo de Peñafort para premiar los relevantes méritos contraídos por cuantos intervienen en la Administración de Justicia y en su cultivo y aplicación del estudio del Derecho en todas sus ramas, así como los servicios prestados sin nota desfavorable en las actividades jurídicas dependientes del Ministerio de Justicia.
En virtud de la autorización contenida en el artículo sexto del Decreto referido, se han ido dictando disposiciones que desarrollan y complementan las normas que se establecieron para la concesión de la condecoración mencionada, y con el fin de evitar la dificultad y confusión en las citas y conseguir la unificación de la disposición normativa propuesta del Ministro de Justicia.
Así le tienen contentito, no sea que vengan mal dadas y este "impresentable" saque su sucia lengua a pacer.
El Consejo de Ministros ha otorgado este viernes la Gran Cruz de la Orden de San Raimundo de Peñafort a Mariano Fernández Bermejo, ex ministro de Justicia. Bermejo tuvo que dimitir por el escándalo de sus cacerías con el Juez Garzón y el fiscal del caso Gürtel.
Orden de San Raimundo de Peñafort
Por decreto del 23 de enero de 1944, se creó la Cruz de San Raimundo de Peñafort para premiar los relevantes méritos contraídos por cuantos intervienen en la Administración de Justicia y en su cultivo y aplicación del estudio del Derecho en todas sus ramas, así como los servicios prestados sin nota desfavorable en las actividades jurídicas dependientes del Ministerio de Justicia.
En virtud de la autorización contenida en el artículo sexto del Decreto referido, se han ido dictando disposiciones que desarrollan y complementan las normas que se establecieron para la concesión de la condecoración mencionada, y con el fin de evitar la dificultad y confusión en las citas y conseguir la unificación de la disposición normativa propuesta del Ministro de Justicia.
Así le tienen contentito, no sea que vengan mal dadas y este "impresentable" saque su sucia lengua a pacer.
Me recuerda mucho la viñeta a la realidad soviética que sucede con el rojo feminista que padecemos desde el 2004. Solo le hubiese faltado que se pusiese el uniforme militar `soviético´ ( uniforme del PSOE ) y ponerse la condecoración en el pecho de la chaqueta, y nos remontaríamos a la época de la U.R.S.S. en la actualidad.
ResponderEliminarQuien manda, manda, ¿y el pueblo?... de parranda. La realidad supera al esperpento. Valle Inclán se queda chiquitito al lado de la imaginación desarrollada por estos camándulas.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola tocayo y cía., la condecoración más vergonzosa de todas la ponemos cada 4 años en las urnas. A partir de esa vienen y vendrán éstas.
ResponderEliminarLos grandes hombres no toleran que se equipare con ellos a un ningún mierda. Como muestra, dos botones:
ResponderEliminarEl general Montgómery, cuando el parlamento británico legalizó la homosexualidad, envió al parlamento una caja conteniendo todas sus condecoraciones de guerra y su título de Caballero del Imperio, junto con una carta indicándole a los Lores, Sires y Pares, dónde se lo podían meter todo.
El Duque de Frías, cuando el Bourbon nombró duque a Adolfo Suarez, puso todos los títulos de la Casa de Frías a disposición de la corona y jamás volvió a usar el título de duque.
¿Qué esperan todas aquellas personas dignas que estén en posesión de la Gran Cruz de San Raimundo de Peñafort, para renunciar a ella y mandársela por correo al Bourbon o a su valido?
¿Es que no queda en España nadie con honor?.
Hay que pagar la sumisión, amigos. El bendito fue un excelente ejemplo de obediencia a la voz de su amo. Debe haberlo aprendido en sus cacerías. Obedecía a su dueño como los perros le obedecen a él.
ResponderEliminarSabe que, a la larga, su amo, generoso, le va a tener bien caliente, alimentado y mantenido.