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domingo, 5 de diciembre de 2010

Maniobras Generales del PSOE

A todos los ciudadanos, nos ha sorprendido la declaración de estado de alarma por parte del Gobierno, a unos, por enterarse de la existencia de esta medida, prevista en nuestro ordenamiento político, a otros porque han visto a los socialistas, propietarios titulares de la máscara del antimilitarismo, actuar “manu militari”, pero pocos se han percatado de la gravedad del hecho, mayor si se contempla considerando la trayectoria histórica del PSOE.
Asímismo, pocos han visto relación entre esta actuación del Gobierno y la que tuvo frente a situaciones recientes, tan graves como la actual o más y ante las que mantuvo una postura bien distinta: la huelga salvaje del metro de Madrid y la huelga general del 29 de septiembre. Sucesos, con distintos protagonistas que esta crísis, respondidos de manera muy diferente, por lo que se podría pensar que no guardan relación, cuando lo cierto es que pudieran estar íntimamente relacionados.
Tras una reciente huelga, legal, en la que se desestimaron todas sus reclamaciones, justas e injustas, ahora, los controladores aéreos han optado por ir a la huelga salvaje, ilegal; el motivo del cambio de actitud, las medidas tomadas en el Real Decreto-ley 13/2010, de 3 de diciembre, sobre “actuaciones en el ámbito fiscal, laboral y liberalizadoras para fomentar la inversión y la creación de empleo”, en el que dentro de su titulo IV, art. 19, se alude a los controladores, sin venir a cuento en ese contexto, amenazándoles con la militarización de su ejercicio profesional. La inoportunidad e inconveniencia del mismo plantea algunas interrogantes:
La reacción, ilegal y desmedida de los controladores, provocando el caos, ¿fue prevista y buscada por el Gobierno, por alguna razón y a ello responde, únicamente, el citado título IV, art. 19?; esto es, ¿fue una provocación para generar, precisamente, esa reacción?.
¿Por qué el Gobierno anunció las medidas que afectaban a los controladores coincidiendo con la operación salida del puente y en puertas de las vacaciones de Navidad?. De ser así, ¿quién es el culpable del caos, las avispas que pican o quién dió el palo al avispero?.
¿Qué consigue el Gobierno induciendo este caos más que previsible?.
¿Para qué?.
En primer lugar, es la excusa para declarar el estado de excepción (ahora, alarma), durante quince días, lo que supone suspensión de garantías constitucionales en el ámbito de aplicación, ampliable en tiempo y espacio, además, logra desviar la atención del debate de las medidas económicas adoptadas en ese Consejo de Ministros, de la situación generada por la exigencia marroquí de anexión de Ceuta y Melilla y sobre todo, de nuestra posible expulsión del euro por la Unión Europea, (temporalmente, dicen), con las terribles consecuencias que tendría para la economía nacional y especialmente, para la economía doméstica de los españoles.
Llama la atención que lo que está pasando, pese a ser previsible, ocurra sin que estén en el país, ni ZP, ni el rey, ni el líder de la oposición, es decir con vacío de poder, lo que plantea la cuestión de si todo el montaje será la puesta de largo de Rubalcaba como candidato socialista en las generales de 2012 o quizá antes, pues se rumorea que Zapatero podría dimitir en breve, presionado por su partido, con lo que el émulo de Beria asumiría la Presidencia del Gobierno.
Decía al principio que la situación de caos atajada "a lo melitar", está relacionada con la huelga del metro de Madrid y la huelga general del 29 de septiembre; la relación viene, en mi opinión, porque el PSOE, partido esencial y vocacionalmente golpista, sabe que la situación económica es gravísima y quizá no solo la económica, sino también la política, especialmente la internacional, si no, ¿por qué se ha desconvocado la marcha sobre Ceuta?, ¿acaso por no ser ya necesaria al estar pactada la entrega?.
Por otra parte, la erosión sufrida por ZP, hace que a día de hoy, esté totalmente quemado, por lo que puede que su partido pretenda, antes de relevarle, cargarle con todas las barbaridades que aún le queden por hacer, ¿quizá la entrega de las plazas de soberanía más las consecuencias de la salida del euro (racionamiento, corralito...), y la posible rebelión patriótica que todo esto pudiese provocar?.
En este orden de cosas, la situación actual y las movilizaciones de militantes de las pasadas huelgas progubernamentales, se parecen sospechosamente a unas maniobras militares, las pasadas, como recuento de efectivos y la presente, como ensayo general de control en caso de rebelión popular. Esto, unido a la afición del partido socialista a los golpes de estado, hace temer lo peor.
Y todo esto, no lo olvidemos, con el beneplácito de la corona, pues si en plena juerga Su Majestad está, casualmente, ausente, es porque está al tanto de todo y como cabía esperar, tratándose de él, lo aprueba.
Algo muy gordo está ya casi cocido pero como se ve, hay al respecto demasiadas interrogantes, muchas dudas razonables aún sin respuesta, y lo peor es que las posibles respuestas a tantas preguntas son mas preocupantes que las preguntas mismas.


1 comentario:

  1. Tann.
    Excelente exposición.
    Conociendo al personal que nos desgobierna, no me cabe la menor duda de que hay gato encerrados detrás de esta decisión.
    De momento ya han conseguido que solamente se hable del estado de Alarma y no de la salvaje subida de impuestos y de recortes sociales.
    El tiempo nos dirá el resto.
    Saludos.

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